Las notas internacionales dominan la semana que termina: la despedida de Pepe Mujica, una figura en la izquierda latinoamericana, y un intento de negociación entre Ucrania y Rusia para detener la guerra. A nivel local, Pro Cultura, una arista del caso Convenios, amenaza con ensombrecer la primaria oficialista, único escenario que brinda mejores opciones de visibilización a la candidatura presidencial de la centro izquierda.
Si los estudios de opinión nos mostraron esta semana que la ciudadanía está inclinándose por un menú conservador, está por verse cuál será la valoración de las conclusiones de la Comisión para la Paz y el Entendimiento sobre la situación en territorio de conflicto mapuche. Lo que hasta hoy sabemos (y apreciamos) es que personas de muy distinto pensamiento llegaron a un acuerdo que podría resolver un conflicto secular. En el análisis de hoy, sabremos en qué sitio de nuestra región estuvo hace unos años Robert Prevost, León XIV, recién designado papa.
En el territorio de los cálculos egoístas. Allí parece estar la opción de los candidatos presidenciales de derecha frente al acuerdo para la Paz y el Entendimiento que busca viabilizar una solución al conflicto secular entre el Estado de Chile y la nación mapuche. En las manzanas del poder en Santiago, el oficialismo se ordenó e inscribió a cuatro candidatos para sus primarias presidenciales, con una mujer perfilándose como la más competitiva. Y lejos, desde EEUU, Trump sigue tensando la cuerda al punto que los hay que se preguntan cuánta de su inteligencia nos falta por conocer mientras la otra mitad apuesta por un desastre en cosa de meses.
Es hora de tiempos convulsos, con incertidumbre en medio mundo. En nuestro país, respecto de las inscripciones de candidatos/as para las primarias, y a nivel mundial, acerca de un actor no identificado con el poder temporal, pero del que se dice que es la colectividad política más antigua de occidente: la Iglesia Católica. En este análisis, revisaremos los candidatos que corren para suceder a Francisco. Pero también por qué el sodio podría eclipsar a nuestro oro blanco. Y las desventuras de una Ucrania ahorquillada por los dos imperios.
Las venturas del Partido Socialista en estos días tienen explicaciones que van más allá de los intereses por la presidencia de Chile, y pareciera que la razón de fondo, cuyo escenario es el futuro parlamento, también mueve a democratacristianos y radicales. En el otro lado, la mesa se sigue tambaleando cada vez que Matthei abre la boca. A nivel mundial, cada pieza que mueven China y Estados Unidos en el tablero son ejercicios de tonicidad para llegar bien armados a la mesa de negociaciones.
En pleno vaivén, las decisiones de Trump le golpearon en la cara con la depreciación de los bonos del Tesoro, ante la represalia de inversionistas chinos que salieron a venderlos en tropel. Tampoco salió muy bien parada la candidata presidencial del PC en su reconocimiento de Cuba como una “democracia distinta”. Fidelidad partidaria, pareció ser. ¿Y cómo se explica que la jefa jurídica de la SEGPRES se dio cuenta de la inconstitucionalidad de la compra de la casa de Allende y no le advirtió a nadie?
Frente al inefable Trump, se empina la serena Sheinbaum. Y si a nivel internacional, el movimiento de piso contrapone al mandatario estadounidense rostros emergentes, a nivel local también hay nombres que pujan por un espacio en las trenzas del poder. Una es la presidenta del partido Socialista, colectividad que quedó muy herida por la destitución de la senadora Allende. Y otra de esas figuras es, como ya lo hemos dicho, el cardenal Chomalí.
Quizás sea esta la campaña presidencial con más candidatos/as en la historia, con 200 personas que ya han manifestado su interés en La Moneda. Una de ellas, Jeannette Jara, habla ya como candidata sin dejar su sillón de ministra. En medio de este acelere, revisamos qué puede pasar con el último pasajero de El Titanic …
Si la mesa de la presidencial de noviembre tiene ya sobre 60 contertulios interesados, con el cuadro como está ahora, según Black & White, en una primera vuelta pareciera que Kayser se impondría con apoyo preferencial de los más pobres, sobre Matthei sostenida por segmentos pudientes y Tohá por clase media. En escena, la necesaria coordinación para mejorar temas como la seguridad es acallada por quienes quieren alcanzar una parte del minuto televisivo.
Mientras a nivel nacional, los partidos oficialistas están lanzando sus cartas a la mesa, en la derecha la pelea está marcada por mostrar… quién es más de derecha, a nivel internacional, la amenaza de una guerra comercial desatada por Trump proyecta la sombra de una caída significativa del PIB en el país. Y es quizás esa incertidumbre la que da razón a un nuevo fenómeno: los millenials se alejan de las promociones en sus empresas para evitar los riesgos de cargos con mayores responsabilidades.
