Festival de errores
Esta penúltima semana de enero hemos visto bastante movimiento político. Inmersos en un festival de errores, gobierno y oposición enfrentan con torpeza un verano que, lejos de lo esperado, no para de lucir entretenido. Y después de las fallidas acusaciones constitucionales, quizás lo será más en el momento en que oficialismo y oposición consagren sus listas de candidat@s a consejer@s constitucionales en listas separadas.
Rolando Cárdenas y A.C. Mercado-Harvey
Antes de entrar en el terreno político nacional, les presentamos nuestra edición semanal. Semana de cumbres internacionales, la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) se ha tomado la agenda de los presidentes de la región que se reunieron en Argentina. Esto, además, le ha traído coletazos para el gobierno de Boric por sus declaraciones sobre lo que está pasando en Perú, sumado a lo de la filtración del audio de la ministra Urrejola hablando mal del canciller argentino. Es decir, más problemas para este ministerio, ya bastante golpeado.
Como parte de las reuniones en el marco de la CELAC se escucharon, nuevamente, las voces sobre una posible moneda común en el continente. Sobre sus ventajas y desventajas nos habla en su columna David A. Harvey, quien compara la situación de la Unión Europea y el euro con la de Sudamérica y una potencial política monetaria conjunta.
Este verano no solo ha sido agitado en Chile, sino que también en la región: las protestas continúan en Perú y en Brasil se han producido una serie de cambios como reacción frente al intento de golpe que ocurrió el 8 de enero en la mayor nación de Sudamérica. Para entender esos cambios que está llevando a cabo la tercera administración de Lula, A.C. Mercado-Harvey nos informa sobre lo que ha ocurrido en los medios de comunicación federales y las policías.
El verano es una época en que hay una serie de actividades culturales, entre ellas se encuentra el festival gastronómico La Despensa de O’Higgins, en el marco de un proyecto FIC de eco innovación agroalimentaria. Pepe Acosta nos cuenta en qué consistió y su importancia para nuestra región. La actividad se realizó durante 3 días en la Casa de la Cultura.
A continuación, el análisis político habitual de la política nacional.
El verano es el tiempo de los festivales de todo tipo, y nuestra política fielmente inserta en nuestra cultura pop busca sorprendernos este verano, compitiendo por quien comete más errores. Oposición y oficialismo se han destacado por ir desarrollando errores no forzados que impresionan.
Vayamos viendo este festival de errores políticos que asombran y que algunos analistas atribuyen más a la levedad con que se miran los temas políticos, que a la inexperiencia.
Indultos, acusaciones y filtraciones
Ya sabemos el flanco que abrió el gobierno con los indultos presidenciales. Plagado de errores de forma y fondo, el lío dejó un flanco que pareció nos acompañaría por toda la época estival, período en que tradicionalmente pasa poco y las figuras de segundo nivel toman las vocerías de los partidos. Por ejemplo, emblemáticas han sido las vocerías de Moreira en la UDI durante las temporadas veraniegas, en que el país está en otra frecuencia.
Queriendo aprovechar este momento, Republicanos acusó constitucionalmente al ministro Jackson, que es la figura relevante del gabinete con peor evaluación ciudadana, pero Chile Vamos no quiere que sean los Republicanos quienes lideren la oposición y se resta de la acusación, lo que inhibe a parlamentarios oficialistas, que pensaban cobrar sus cuentas al ministro y la acusación se cae.
Está claro que Chile Vamos pasa por una encrucijada, ya que el triunfo del 4 de septiembre se relaciona con que un sector importante de la centroizquierda se unió al Rechazo, pero es poco probable que ese sector pueda caminar junto a Republicanos en una senda política común, por lo que mantener esa alianza exitosa electoralmente requiere dejar fuera al partido de Kast.
La oposición, además, había hecho tres maniobras a partir de los indultos, que tienen amplio rechazo ciudadano: presentación a la Contraloría, presentación al Tribunal Constitucional y la acusación constitucional a la exministra Ríos.
La acusación constitucional se cayó estrepitosamente por su débil presentación jurídica, por una parte, y porque republicanos aprovechó de cobrar sus cuentas, rechazándola. Es importante destacar la defensa realizada por José Antonio Viera Gallo, figura señera de los mentados treinta años. Al caerse la acusación, la herida sangrante del gobierno provocada por los indultos comienza a cerrarse.
Por otra parte, el Tribunal Constitucional acogió de manera unánime la impugnación a siete indultos presentados por la oposición, lo que paralizó la acción que llevaba adelante la Contraloría, otorgando otro veranito al gobierno.
Raya para la suma, la oposición nos demuestra cómo transformar una mano ganadora en una derrota, solo a partir de equivocaciones propias.
Pero como el gobierno no resiste equivocarse, nos entrega la trama de las filtraciones de la Cancillería. Ya suficientemente expuesta en los medios, solo diremos que, al igual que los indultos, caso que debió cerrarse de una vez, en este caso el desaguisado provocado por un error, se agrandó con las declaraciones de la canciller, que dijo ignorar que estaba siendo grabada. El resultado es que esas declaraciones y su denuncia presentada al Ministerio Público mantendrán este tema un tiempo más en la agenda pública para beneplácito de la oposición.
Comité técnico de admisibilidad, expertos y consejeros constitucionales
El proceso constituyente 2.0 avanza y ya tenemos el comité técnico de admisibilidad con catorce integrantes, siete oficialistas y siete opositores, comité de expertos, doce oficialistas y doce opositores, por supuesto totalmente paritarios.
Dos elementos destacables: la incorporación de Claudio Grossman por parte del PPD al comité técnico, lo que representa también una reparación a su fallida candidatura a La Haya y la caída de la opción de Sebastián Edwards al grupo de expertos, respaldado por Demócratas, lo que puede tener consecuencias.
Y respecto a los consejeros, viene la ingeniería electoral para los partidos. Convengamos que la nueva constitución será minimalista y genérica, ya que nadie tendrá mayorías para imponerse, los consensos grandes están y no habrá sorpresas. Por tanto, la elección de consejeros se transformará en una medición de fuerzas que marcará las futuras elecciones y al gobierno en su gestión y programa.
Está claro que la oposición irá en dos listas: Chile Vamos, que además busca incorporar a Amarillos y demócratas, y republicanos y el Partido de la Gente, PDG, que ha recibido la visita de su líder.
Mañana sábado el PS tomará la decisión de ir con Apruebo Dignidad, o conformar con el PPD, PR, PL y DC una segunda lista. Los resultados de una elección con dos listas por cierto marcarán los énfasis del gobierno y su programa, la distribución de cargos, etc. Pero ello no debe confundirse con una disputa entre Apruebo Dignidad y la ex Concertación por la hegemonía, porque esta última cumplió un ciclo y es pasado. El socialismo democrático, en cambio, representa un modelo social demócrata en construcción que debe decantar y el momento de prueba de su vigencia será la definición en la nueva constitución de lo que se ha denominado el estado social y democrático de derechos.
Como se puede apreciar, este sigue siendo un verano para nada aburrido.