Iancu Cordescu, candidato a diputado por el distrito 16

“La gente necesita que sus representantes conecten con sus necesidades”

Juventud y diversidad son los sellos que marcan la postulación a la Cámara de Diputados por el distrito 16 de Iancu Cordescu. Se reconoce como “un cabro sanfernandino” con trayectoria profesional y experiencia como embajador de la ONU en Chile, todo lo cual lo potencia para tener un rol en el recambio en el Parlamento.

Por Edison Ortiz

El Regionalista ha conversado con diversos aspirantes a la Cámara Baja. En esta ocasión, lo hicimos con Iancu Cordescu, un sanfernandino de tomo y lomo que espera ganarse un espacio en el Congreso Nacional en la elección del próximo domingo 21 como independiente en la lista Apruebo Dignidad.

Se reconoce como “un cabro sanfernandino”, estudiante en 7° y 8° en el liceo Neandro Schilling y en el San Fernando College en su enseñanza media, tiempo en el que fue dirigente del movimiento pingüino en 2006. Luego, los estudios superiores de ingeniería en la Universidad Técnica Federico Santa María lo obligaron a migrar. Fue presidente de la federación; no olvida las palabras del rector: “en vez de ingeniería, usted debía haber estudiado ciencia política, ya que es político”. Estudió Técnico Jurídico y Administración Pública.

¿Qué te hace ingresar de lleno a la política, en particular, cuando la actividad está en desprestigio creciente?

Siento que debería haber en ella más gente preparada. Tengo una vasta trayectoria profesional, incluso fui embajador joven de la ONU en Chile; me he preparado para desarrollar una buena función como parlamentario y tengo harta experiencia en políticas públicas por mi trabajo como consultor y docente en otros países.

Creo, además, que en la coyuntura actual hay dos pugnas; una de competencia, falta de ella y de liderazgos alternativos a los de siempre, y otra de competencias con s, es decir de tener el talante profesional para hacer una buena gestión parlamentaria. Hoy el promedio de edad de los parlamentarios es de 50 años y son pocos los que tiene menos de 40. Creo que hay que ponerle a esta elección mucha competencia con s.

Quiero contribuir a la gestación e implementación de buenas políticas públicas. Pienso que soy una opción real, joven, represento a la diversidad sexual de esta región.

Hoy, cuando la gente necesita representantes cercanos, que conecten con sus problemas cotidianos -trabajar, tener estabilidad y comer-, la agenda pública solo habla  de reformas políticas, pero no del pan que ya alcanzó a dos mil el kilo, la bencina ya está pasando la barrera de los mil pesos, el balón de gas de 15 kilos ya pasó los veinte mil y tienen que sobrevivir con un sueldo mínimo,  mientras sus representantes ganan ese sueldo mínimo en un día, no asisten a sus funciones y les pagan igual.

Somos el país que tiene una de las dietas parlamentarias más elevadas del mundo y la más alta de la OCDE. ¿No crees que es un insulto al chileno de a pie recibir el equivalente a 38 veces el sueldo mínimo?

Es una dieta exagerada, un parlamentario chileno gana un sueldo mínimo por día, y a veces sin siquiera asistir a su trabajo. Mientras al resto de los trabajadores se les descuenta y por ausencias reiteradas hasta se les echa. Así como necesitamos rebajar a un nivel aceptable las dietas – por ejemplo, un tope de 10 o 20 veces el sueldo mínimo y que quede establecido en la nueva constitución – también requerimos más instrumentos de fiscalización. Si un parlamentario falta a su trabajo, se le debe descontar igual que al resto de los chilen@s.

El sistema político chileno no está funcionando porque no tiene presión ni controles, hay que ponerlos. También debemos mejorar la carrera funcionaria, no puede ser que cuando hay cambio de administración se cambié desde el ministro hasta la estafeta de un servicio. Hay que reducir los cargos de confianza, profesionalizar el estado y generar incentivos a los funcionarios de carrera.

Me imagino que sabes que este es un distrito difícil, el antiguo “riñón de la oligarquía”, zona de latifundio donde fue muy difícil implementar la reforma agraria y modernizar el campo.

Y, sin embargo, sus habitantes tienen los mismos problemas que el resto de los chilen@s: necesitan trabajar, tener seguridad, comer y un lugar digno dónde vivir y resulta que estos mínimos comunes no están en el debate político. Por eso la gente empieza a buscar referentes como Kast. Piensa que pronto se acabará el IFE, los retiros; la inflación se está descontrolando y la gente quiere vivir y poder comer. Por eso necesitamos un parlamento que esté en sintonía y Apruebo Dignidad debe dar respuestas acertadas y concretas.

A propósito de lo anterior, ¿cómo evalúas la gestión del actual gobernador Pablo Silva?

Creo que no lo está haciendo bien. A esta región, el ejecutivo le está recortando el presupuesto y él anda preocupado de si lo invitan o no a una actividad. Está más preocupado por la farándula y no por el recorte presupuestario que le harán a esta región. Hay que dialogar con los Core y hacer un frente regional para defender el presupuesto y no lo rebajen.

¿Qué opinas del fenómeno José Kast?

Lo importante en él es lo que representa – estabilidad, orden, seguridad – y preguntarse por qué las demás coaliciones y liderazgos deshabitaron esos espacios. Ni la antigua Concertación ni el Frente Amplio (FA) han ocupado ese espacio con esos mínimos comunes de los que hemos estado hablando. Necesitamos mejorar “la bajada comunicacional” de nuestro discurso para que aterrice en el barrio y en la cotidianeidad de la gente.

Si son gobierno cómo lo harán, cuando una de las críticas que se les hace es su falta de experiencia…

Si el FA y Apruebo Dignidad ganan debe tener dos perspectivas estratégicas, en especial en esta región: no es lo mismo la alianza que logra ganar que aquella que garantiza la gobernabilidad, necesitaremos crear un cogobierno y el trabajo con el PS en ese sentido es un buen aliciente.

Nicolás Ibáñez, ex dueño del Líder y figura del empresariado dijo que si bien le gusta Kast, preferiría que gane Boric, dado el escenario adverso que tendrá el próximo gobierno y habrá a quién echarle la culpa por todo lo que salga mal y así oponerse a la nueva constitución…

La Convención ha hecho un excelente trabajo, una muy buena pega, pero está obligada a bailar al ritmo que le impuso Piñera y con plazos acotados. No pondría a la Convención en la lógica del empresario. Sí puede ser más complejo recaudar 8 puntos del PIB, revisar la evasión y la elusión que está super claro cómo ocurre para alcanzar 7 de los 8 puntos y a la vez considerar el impuesto a los superricos y los royalties a la minería y la pesca para obtener el faltante y así poder financiar el programa de gobierno que está orientado a la gente común y corriente que necesita trabajar, vivir y comer, y a los pequeños empresarios azotados por la crisis económica y la pandemia.

Boric pone su foco ahí, en ese mundo. Pienso que el escenario no será desfavorable, aunque la derecha, y sus dueños, estén pensando en un posible escenario para Kast 2026.

Iancu, si bien la derecha hoy se está concentrando en la figura de Kast, también hay otros fenómenos interesantes. Al parecer la elección senatorial en esta región y en ese mundo será favorable para Javier Macaya y su equipo renovador en la UDI y de ser electo, quedará además como presidente del partido más significativo de la derecha y puede ser un obstáculo para un escenario Kast 2026. ¿Qué piensas?

Hay un fenómeno interesante con las figuras jóvenes de derecha como Carla Morales en este distrito: estamos terminando con el proceso de “purga”, y liberándonos de los liderazgos de la transición. Yo, por ejemplo, no me imagino conversando con Chadwick o con “los hombres grises” de la transición un proyecto de ley, pero sí lo haría con Macaya, Sepúlveda o Castro.

En ese sentido, Macaya puede jugar un rol interesante “rejuveneciendo” a la UDI. En su momento, no contó con el patrocinio de Novoa y eso le da credenciales. Yo veo que Macaya puede hacer una mejor pega que Barros o Virginia Troncoso. No lo veo como un problema, como sí veo a Barros.