La rueda de la fortuna no está clavada
Rolando Cárdenas y A.C. Mercado-Harvey
Esta semana comenzó agitada, tanto en Chile como en el resto del mundo. El pasado domingo 30 de octubre, se realizaron las elecciones más reñidas que se hayan visto en Brasil con una diferencia de un 1% entre Lula y Bolsonaro. Posterior a ello, vimos las dramáticas escenas de camioneros, partidarios del actual presidente, bloqueando carreteras en todo el país y también manifestantes pidiendo un golpe militar frente a cuarteles en Río de Janeiro. Sobre estas temáticas reflexiona A.C. Mercado-Harvey en su columna sobre Brasil y la elección de Lula por tercera vez.
También en esta misma línea, Edison Ortiz, nos compartió una crónica sobre la única e histórica visita que hizo Lula a Rancagua en 1991, cuando recién volvíamos a la democracia en Chile. Además, les compartimos un nuevo Diálogo Regionalista con el académico brasileño, Alberto Aggio, quien nos dio su visión sobre esta segunda vuelta, el triunfo de Lula y los desafíos a futuro de su gobierno.
Continuando con nuestra línea de temas internacionales, David Harvey analiza la histórica elección del primer ministro británico no blanco, tanto en Gran Bretaña como en Europa. En su columna nos habla de la nueva derecha globalizada y cómo Sunak representa la globalización neoliberal más pura.
De todas las noticias políticas de la semana, la más importante Gonzalo Martner nos comparte sus reflexiones sobre la reforma al sistema de pensiones. Con gran claridad explica los componentes de la propuesta y propone un par de medidas que no están contempladas en la reforma, como eliminar las compañías de seguros y emular el sistema sueco, uno de los mejores del mundo
La agenda política local también ha estado copada con el anuncio de la reforma del sistema previsional que propone el ejecutivo, con escasas posibilidades de pasar en el Congreso, y la renuncia de Karol Cariola a la postulación a la presidencia de la Cámara de Diputados. A continuación, nuestro análisis de estos y otros temas de la contingencia política nacional.
Tratando de retomar el control sobre la Agenda
El gobierno ha entendido que debe caminar y mascar chicle simultáneamente; estuvo seis meses abocado a la campaña del Apruebo que terminó en una gran derrota política el 4S. Eso dejó al gobierno en un estado de perplejidad y a sus dos coaliciones enfrentadas respecto de cómo seguir, tanto el rumbo del gobierno como el proceso constituyente.
En este camino y, entendiendo que está fuera de la mesa de las decisiones de la continuidad del proceso constitucional, ha intentado enfrentar los principales problemas que preocupan a los chilenos. La ministra Tohá ha dado fuerte impulso a la construcción de una agenda estratégica para enfrentar la delincuencia con amplios consensos y relevando la acción de los gobiernos locales. Esta es una agenda complementaria a la inversión en infraestructura para las policías, con una invitación amplia, pero que no esperará; si alguien se quiere restar, no saldrá en la foto.
Por cierto, que, además, debe haber preocupación por los detalles; por ejemplo, hace casi un mes que el presidente solicitó la expulsión del país de los migrantes colombianos que atacaron a Carabineros en Puerto Montt, eso pareciera no ser posible este año, generando un efecto adverso al buscado, cuando se publicitó la decisión presidencial. Sigue pendiente la situación de la migración descontrolada en el norte, además de la acción de bandas delictuales con delitos de alta connotación en las grandes ciudades.
El presidente, el miércoles 2 en cadena nacional, anuncia la esperada reforma de pensiones; son mensajes claros: sistema mixto, termino de las AFP, 6% de cotización extra para solidaridad intergeneracional, fin a los multifondos, un solo ente estatal para la recaudación y pago de pensiones, y las AFP se pueden transformar en gestores de inversiones. Políticamente la piscina carece de agua, por tanto, se ve difícil la gestión en el parlamento. Sin embargo, hasta el momento, comunicacionalmente, se han visto más reacciones positivas, considerando que las encuestas indican que la gente quiere el 6% adicional en sus cuentas individuales.
En otro ámbito, pero que se relaciona con las posibilidades del ejecutivo de realizar una adecuada gestión legislativa, la ministra Uriarte ha desplegado ingentes esfuerzos por lograr que la mesa de la Cámara de Diputados quede en manos del oficialismo. El PC renunció a la posibilidad de presidir la Cámara, poniendo presión a los partidos que están incumpliendo el acuerdo administrativo, léase la DC y el PDG.
En otro orden de cosas, es importante destacar la gestión del ministro de obras públicas, Juan Carlos García, quien ante los graves problemas de las constructoras contratistas del MOP (algunas grandes ya han quebrado) ha decidido hacerse cargo del problema. Esto es algo que ha reconocido el presidente del CCHC: que el gobierno de Piñera no quiso hacer, y ha buscado tanto pagar contratos pendientes como aumentar los presupuestos de las licitaciones, logrando que no queden sin ejecutarse, dado el grave problema del alza de precios de los insumos.
Momento de definiciones políticas: El cónclave
Expectación existe por el cónclave oficialista, planificado para el domingo 6, que debiera resolver la disputa entre las dos almas de este gobierno, Apruebo Dignidad y el Socialismo Democrático, Claramente, estas dos coaliciones oficialistas tienen miradas distintas de cómo enfrentar la gestión de gobierno. Estas tensiones, finalmente, paralizan al gobierno, ya que el presidente Boric muchas veces da señales contradictorias en función de dejar a todos contentos, y eso no es, como enseñaba Lenin, retroceder un paso para avanzar dos; es no avanzar.
Se espera, entonces, que esta instancia de coordinación del gobierno y las fuerzas que lo sustentan determinen claramente la dirección y alcance del programa de gobierno, ajustado a la nueva realidad que vive el país, tanto en lo político, como social y económico.
Carlos Ominami ha recordado la frase de Mitterrand: cumpliré totalmente mi programa de gobierno cuando tenga el 100% de los votos. El pragmatismo y la capacidad de adaptación son vitales para el éxito de un gobierno de minoría que, además, apenas iniciada su gestión sufre una gran derrota electoral, además de un contexto global adverso. Habrá que esperar los resultados del cónclave y, quizá, una nueva y pragmática hoja de ruta, pero hay que reconocer que la derecha está en contra.
¿Demócratas, o el baile de los que sobran?
Finalmente, esta semana, personeros de la ex Concertación (radicales, DC, PPD), que habían dejado sus afiliaciones partidarias, se constituyeron como partido político. Con una falta de imaginación increíble dejaron su religión y se convirtieron en demócratas a secas, copiando el nombre del partido político de centro izquierda de Estados Unidos. Es decir, ahora, igual al país del norte, tenemos Demócratas y Republicanos, pero con un peso mínimo y un tamaño ínfimo.
De este modo, el centro político se está llenando de partidos diminutos. Es decir, PDG, DC, Demócrata y PR. Al parecer, con el auge de los extremos, el centro comienza a sobrepoblarse como tabla de salvación. El problema es que ni siquiera son caras nuevas, sino un reciclaje total. Si algo han mostrado las últimas elecciones y encuestas es que la gente está cansada de lo mismo, pero, a la vez, no sabe en qué dirección ir. Con esa indefinición del electorado es con lo que cuenta esta nueva fuerza política que intentará posicionarse en este nuevo escenario.
¿Y el proceso constituyente?
Malos vientos parecieran correr para la continuidad del proceso, en palabras de la presidenta de la FRVS, Flavia Torrealba, quien ha indicado que ya pasó el momento constituyente. Aun cuando se escuchan declaraciones en el sentido de que a mediados de noviembre podría haber acuerdo, más bien parecen maniobras dilatorias para dejar que este proceso se pierda en el olvido y las urgencias del momento.