Por Edison Ortiz
Pese a su fama de tipo duro, es un personaje afable, cálido y de voz muy serena. Supe de su leyenda allá por mediados de los 80, cuando ingresaba clandestinamente al país y daba conferencias de prensa. Lo conocí personalmente en 2009, cuando me correspondió reemplazarlo como coordinador territorial de la Campaña de MEO (Marco Enríquez-Ominami).
El Regionalista logró conversar con el mítico sobreviviente de la dirigencia del MIR, a propósito que este sábado 5 de octubre se cumplen 50 años de la caída de Miguel Enríquez en un combate irregular con las fuerzas represivas de la DINA en la calle Santa Fe en la comuna de San Miguel, donde compartía la clandestinidad con su pareja Carmen Castillo, el rancagüino José Bordaz Paz, conocido como el coño Molina y Humberto Sotomayor, sobreviviente de aquel día triste.
La siguiente fue la conversación con uno de los sobrevivientes del MIR, sobrino de Salvador Allende e hijo de su hermana Laura.
ER: ¿Andrés, qué actividades están organizadas para conmemorar el medio siglo de la muerte de Miguel?
APA: Hay varias. Este viernes 4 se realiza un seminario en el Archivo Nacional por la mañana y que durará hasta la tarde. Luego, a las 18:00 horas, se desarrollará una actividad relevante con la creación del fondo Miguel Enríquez, donde se expondrán documentos inéditos de Miguel y en que harán uso de la palabra la directora del Museo, Carmen Castillo y el director del archivo.
El sábado 5 por la mañana nos reuniremos en el monumento a Miguel en el cementerio general y desde allí marcharemos hasta la tumba de Miguel y luego a la del MIR.
El sábado en la tarde, en el museo de la Memoria, se desarrollará una actividad artístico-cultural y el domingo a las 11 de la mañana se inaugura una jornada con actividades culturales como exposiciones, poesía, ollas comunes, etc.
Finalmente, a las 18:00 horas, en Villa Grimaldi se realizará un cierre de las actividades conmemorativas de los 50 años, ocasión en que se leerá una declaración.
ER: Andrés, sabemos que, dado el nivel de represión desatado por el régimen, la comisión política del MIR, y en particular tú, instruyeron a mediados de 1974 que Miguel saliera del país, pero hizo caso omiso de esa decisión. ¿Pesó sobre esa decisión el recado que le envió Allende antes de morir, transmitido a través de su hija Tati, “dile a Miguel que ha llegado su hora”?
APA: Desde luego que pesó. Miguel se sentía comprometido con la resistencia y con el legado de Allende y eso en parte pudo haber influido en que se quedara, por esa misma razón queríamos que saliera, pero estaba tan comprometido con la reorganización que se exponía demasiado y eso hacía que el cerco sobre él se estrechara cada vez más. Recuerda que en septiembre de ese año había caído una parte importante de la directiva, entre ellas, Lumi Videla y Sergio Pérez, luego fue detectado un enlace, ubicaron la casa, hicieron operaciones rastrillos en el área y en un almacén, el guatón Romo logra identificar la casa de calle Santa Fe. Como se sabe llega un aparato poderoso, se produce el enfrentamiento y cae Miguel luego de combatir. Logran escapar el coño Molina y Humberto Sotomayor y la Carmen se desmaya y pierde al hijo que llevaba en su vientre.
ER: Sabemos que en historia pasa lo que pasa y no lo que pudo haber pasado pero, haciendo historia contrafactual, la caída de Miguel, así como la de Carlos Lorca, Ricardo Lagos Salinas, Exequiel Ponce, y muchos otros, ¿no crees que influyó en que tuviéramos la transición que tuvimos?
APA: Sin duda influyó. Cayeron los más comprometidos, aquellos que ejercían mayor liderazgo, y en eso influyeron dos fenómenos: la represión sistémica y selectiva sobre los partidos de izquierda y que en los años 80 desarticuló al MIR y también al Frente y, por otra parte, la renovación socialista, donde conocidos personajes se dieron vuelta la chaqueta, se unieron a la DC y se subordinaron a los Estados Unidos y al empresariado local y se hizo la transición que tuvimos con una izquierda neoliberal.
ER: ¿Cuál es el mensaje de la causa de Miguel a 50 años de su inmolación?
APA: Fíjate que se ha acercado mucha gente en torno a esta conmemoración, pero la izquierda más radical sigue atomizada, llena de personalismos divergentes, sin ninguna capacidad de influir. A su vez, el sindicalismo está por el suelo y las organizaciones sociales totalmente clientelizados y con un gobierno que ha intensificado la represión social, que va rumbo de un autoritarismo donde hace falta una izquierda influyente y consistente.
Lo que yo percibo es que hay mucho descontento en algunos sectores del Frente Amplio y del PC, pero también en el gobierno hay un segmento aspiracional que ha mejorado su calidad de vida, empezando por el presidente de la república.
ER: Andrés, respecto de lo mismo, ¿cuál es tu evaluación del gobierno de Gabriel Boric?
Yo estoy francamente decepcionado y tengo una visión muy crítica. Me siento defraudado, a Boric lo conocí bastante joven y me impresionó, había leído muchos documentos del MIR y manejaba perfectamente nuestro lenguaje. Por lo tanto, me impresionó aún más su vuelta de chaqueta: su subordinación a Estados Unidos en política internacional, su complacencia ante el mundo empresarial. Si bien es cierto, el suyo es un gobierno que no tenía mayoría parlamentaria, pudo haber hecho política con el mundo social para producir transformaciones, pero no lo hizo. Boric, para mí, es una gran decepción y me siento defraudado.
1 comentario en “Medio siglo del asesinato de Miguel Enríquez, líder del MIR”
Obrigado por trazer mais informações sobre o tema.