Nueva denuncia en contra del alcalde de Rancagua y renuncias en la CORMUN

Equipo de El Regionalista

El verano sigue siendo duro para el alcalde de Rancagua. El estío no le da tregua y esta semana tuvo dos nuevos golpes: uno de puertas adentro, en la Corporación Municipal de Servicios Públicos Traspasados, CORMUN, que preside, y otro que le llega con una nueva revelación de la carpeta investigativa de la Fiscalía, esto último, dado a conocer por CIPER, medio de prensa que no ha cesado en la difusión de denuncias de corrupción contra Juan Ramón Godoy.

La historia ya se arrastra por más de dos años, y se inició a muy pocos meses de que el nuevo edil de Rancagua asumiera el cargo a mediados de 2021. Entonces, nuestro medio publicó las denuncias que se acumulaban sobre la gestión de la Corporación Municipal: sueldos millonarios a sus directivos, contratación del familiar de un concejal, adjudicación directa de obras a un amigo del alcalde. Semanas después, CIPER recogió esas denuncias, mientras la Fiscalía tomaba acciones en 2022, incluyendo el allanamiento de oficinas y la confiscación de equipos computacionales.

Los detalles de la investigación del Ministerio Público siguen sumándose a lo que podría ser un eventual juicio por conductas corruptas del alcalde Godoy. En el centro de ellas, está la denuncia de obtención de beneficios por parte de contratistas de la Cormun y de la Municipalidad, por ejemplo, en la compra de un vehículo que una de esas empresas hizo en favor del edil. O la retribución de ayudas de campaña electoral con adjudicación directa de contratos para otros empresarios. Y la última de las denuncias: la contratación del arriendo de un departamento que hizo el contratista de la Cormun Carlos Rodríguez Cajas de la empresa Gestión de Residuos a nombre del alcalde. En este caso, el empresario habría pagado el primer mes de arriendo, la garantía y su comisión. El testimonio del corredor de propiedades señala también que los pagos posteriores del arriendo fueron hechos siempre en efectivo mientras duró el contrato, entre enero y noviembre de 2022.

Por cierto, todo esto tendrá que ser sustentado en un eventual juicio, si es que la Fiscalía determina llevar los antecedentes a tribunales.

Mientras, tanto Juan Ramón Godoy como el conocido abogado santiaguino Ciro Colombara insisten en que se trata de una campaña y denuncian persecución con fines políticos.

Cormun se queda sin directores

Sin embargo, esta semana el alcalde tuvo un nuevo revés, esta vez en casa. El directorio de la Cormun, presidido por la autoridad, virtualmente se desintegró dado que sus otros dos integrantes, Hugo Boza y Sergio Shipley, renunciaron a sus cargos.

Mientras Boza, médico militante del Partido Regionalista Verde, sostuvo su renuncia en los cambios frecuentes de la plana ejecutiva de la Corporación, en la toma de decisiones inconsultas y en la falta de transparencia, lo que dificultaba su acceso a la información, de Shipley no se conocieron las razones de su apartamiento del cargo. Sergio Shipley es un antiguo militante del PPD.

Y aunque es cierto que se rumorea el interés de los regionalistas verdes y de Boza por la alcaldía de Rancagua, lo que por sí mismo podría dar soporte a su renuncia, el hecho más parece apuntar a la necesidad de no verse comprometido en la estela del actual alcalde Godoy, hasta ahora cuando menos dudosa.

Las eventuales acciones futuras ante tribunales indicarán la pauta de lo que sucederá con Juan Ramón Godoy. Lo que por ahora queda claro es que con la renuncia de los únicos dos directores de la Cormun y con la aparición de nuevas denuncias de corrupción, la pista se pone aún más pesada para la primera autoridad de Rancagua.