La contingencia política ha estado marcada por el lanzamiento de las campañas de consejeros constituyentes y su ofertón programático, triunfos del gobierno en el parlamento, los narcofunerales, la demolición de casas narcos y las condenables expresiones de la diputada Cordero respecto de la senadora Campillay.
Rolando Cárdenas
Responsabilidad, una palabra demodé en campaña
Ya se han iniciado las campañas a consejeros constituyentes a nivel publicitario y nuevamente, al igual que la campaña 2021, la oferta es un programa de gobierno. Aumentar el empleo, mejorar la salud, la educación y principalmente resolver el problema de seguridad, son parte de las ofertas de los candidatos a consejeros de todo el espectro político, así como una gran cantidad de derechos sociales garantizados. Por supuesto, nadie se refiere a lo esencial de una constitución, la estructura de gobierno. Y eso que, en palabras de Sartori, “una constitución sin declaración de derechos sigue siendo una constitución, mientras que una constitución cuyo núcleo y parte más importante no sea la estructura de gobierno no es una constitución”.
Nos referimos a esta situación por dos razones: una, es que se generarán expectativas sobredimensionadas respecto de los efectos de una nueva constitución en nuestros problemas como sociedad y, en segundo lugar, por el grave fenómeno de dispersión que ha afectado desde hace varios años al sistema político. Esta fragmentación genera una gran complicación no solo para la gestión legislativa, ya que al fortalecer agendas identitarias y particularismos es imposible que se generen los consensos que se requieren para enfrentar los problemas que afectan a nuestro país. La más reciente manifestación de este fenómeno es la renuncia de la senadora Alejandra Sepulveda al FRVS junto al diputado Félix Bugueño y algunas autoridades locales de la región de O’Higgins. La posibilidad de enfrentar esta situación es a través de definiciones que contenga la nueva constitución; es de esperar que no tengamos que lamentar una nueva oportunidad perdida.
Lo único permanente es el cambio
El ya manido mantra de los gurús de la autoayuda y el coaching es una buena frase para analizar los problemas de un gobierno que se ha encontrado con un conjunto de dificultades ya sea externas o internas.
Y estas dificultades le han significado una oposición que ha levantado un discurso confrontacional, demandando al actual gobierno soluciones a problemas como la delincuencia que no solo son de larga data, sino que además demandan soluciones de mediano y largo plazo con continuidad en la gestión gubernativa.
Junto a lo anterior está el fuego amigo, ya sea el que han levantado Jadue y Sharp desde la izquierda, transformándose en los guardianes de la fe (entiéndase “programa”) y, por otra parte, el que se produce en las luchas de poder interna por las prebendas del estado, que en los hechos se traduce en una gestión que debe considerar cada demanda particular, so pena de lidiar con la amenaza de los agraviados de constituir un nuevo partido, votar de una manera contraria a los deseos del gobierno, etc.
Este gobierno está marcado por la contingencia, y en particular el Ministerio de Agricultura. Recordemos que al quiebre de las cadenas logísticas producto de la pandemia se le agrega el impacto de la guerra de Ucrania que acelera la crisis de alimentos, al ser Ucrania y Rusia los graneros del mundo, lo que significó un programa especial de seguridad y soberanía alimentaria construida con los actores. En otra arista, el 4S representó un rechazo a muchas de las ideas programáticas del actual gobierno que estaban contenidas en la propuesta de texto constitucional. Por último, la contingencia nos trajo en el verano los incendios forestales que arrasaron con vidas, casas y cosechas en nuestros campos y, ahora, nos alcanza la gripe aviar, todos fenómenos que obligan a la autoridad a reenfocar sus esfuerzos y recursos, debiendo postergar muchas de las promesas gubernativas.
Las noticias de la semana
El gobierno está semana ha tenido buenas noticias, puesto que el Senado aprobó de manera unánime el proyecto de las 40 horas, de la mano de un manejo dialogante y con los actores por parte de la ministra del Trabajo, lo que demuestra que es posible llegar a consensos.
En la Cámara de Diputados se rechazó el proyecto de autopréstamo, que solo consiguió 39 de 89 votos que se requerían para su aprobación. Lo negativo fue el descuelgue de varios parlamentarios oficialistas, incluyendo de manera sorpresiva a la diputada PC Karol Cariola, lo que le valió un fuerte bullying por parte de su par, Pamela Jiles.
También de manera casi unánime la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley que duplicó el bono marzo, un subsidio que al ser un instrumento focalizado, ha recibido gran respaldo.
Sin embargo, la agenda pública se ha concentrado en tres temas. Por una parte, unas declaraciones miserables de la diputada Cordero (independiente RN), en contra de la senadora Fabiola Campillay, que recibió el rechazo unánime del Senado y de gran parte de los actores políticos, algo valorable y que pone límites a lo que es la legítima lucha política. El punto negro en esta situación lo puso la bancada RN al valorar el trabajo de Cordero y argumentar que necesitaba conocer el contexto de las declaraciones para pronunciarse. A esa postura de la bancada, es importante sumar el silencio hasta ahora de la directiva de RN.
Por otra parte, el alcalde Carter ha continuado con su despliegue de demolición de ampliaciones de las llamadas narcocasas, recibiendo muestras de apoyo de manera transversal y por supuesto de la opinión pública que ve en su actuar una autoridad que algo hace con este verdadero flagelo que es el narcotráfico. El fiscal nacional, Ángel Valencia, valoró la colaboración entre la fiscalía y el municipio el miércoles en la mañana y en la tarde, anunció sumario en contra del fiscal Ernesto Navarro, quien entregó al municipio de La Florida la información de las casas utilizadas para el microtráfico. Este error del fiscal nacional fue aprovechado por Carter para involucrar al gobierno, versión según la cual, una llamada telefónica desde La Moneda habría provocado el cambio de opinión del fiscal, lo que finalmente habría redundado en tener una actitud timorata frente a este problema.
Y el tercer elemento ocurrió en Valparaíso, específicamente en el sector Playa Ancha, donde por el funeral de un traficante cerraron varios colegios y campus universitarios. Lo complejo es que las autoridades ministeriales mostraron descoordinación en este tema, el ministro de Educación manifestó comprender la decisión de los directivos de los centros educativos y la ministra Tohá apareció criticando la medida, aduciendo que los delincuentes no pueden ser quienes provoquen estas decisiones, olvidando en sus declaraciones que la seguridad depende de ella. Después se trató de presentar como una falta de comunicación entre los organismos policiales y los colegios, ya que se habrían tomado los resguardos para que no ocurrieran problemas, pero el error ya se había cometido.