En medio de alarmantes señales de deterioro de la educación en Chile y la región, consecuencia del período de pandemia, el proceso de priorización curricular asentado en el trabajo de l@s docentes, de acuerdo a la realidad territorial y con participación de las familias, da luz en un panorama de incertidumbre.
María Isabel Díaz
Doctora en Educación, exsubsecretaria del Ministerio de Educación

Así como hubo voces que alertaron sobre las consecuencias de la selección y el lucro en la educación, hoy se están incubando aceleradamente los efectos de la peor crisis en el sistema educativo, producto de la pandemia. Los organismos internacionales (UNESCO, UNICEF, Banco Mundial, entre otros) advierten, en un reciente informe de 2022, que la pérdida de aprendizajes claves tendrá un impacto de gran magnitud en el desarrollo cognitivo y socioemocional, especialmente de los grupos más desfavorecidos, lo que incrementará la pobreza y disminuirá drásticamente la falta de oportunidades. Se estima que el 70% de los niños de 10 años de países de ingreso medio y bajo no pueden comprender un texto simple.
Durante el año 2022, en nuestro país, hemos identificado un conjunto de componentes que dan cuenta de un contexto aún más desfavorable de lo que se proyectaba para la reactivación del proceso educativo. Son elementos de ese contexto el incremento de la inasistencia grave de los estudiantes matriculados; la profundización de la violencia al interior de los establecimientos; los problemas de salud mental; el aumento de niñ@s y jóvenes excluidos del sistema educativo; la sobrecarga, ausentismo y déficit de docentes y el crecimiento alarmante de la obesidad infantil. Se suman el insuficiente cumplimiento de las metas curriculares priorizadas y los inquietantes resultados sobre la escasa comprensión lectora en niños de cuarto básico, como así también la drástica disminución del vocabulario en niños del nivel parvulario.
Todos ellos son indicadores que permiten predecir que habrá un descenso significativo en el logro de aquellos objetivos de aprendizaje imprescindibles para la trayectoria educativa y que serán los grupos más desfavorecidos los que enfrentarán fuertes brechas, afectando sus oportunidades y calidad de vida.
Estos reportes sintetizan el contexto de crisis en que nos encontramos y presionan hacia la urgente necesidad de abrir espacios para analizar las políticas educativas, sus horizontes, sus ámbitos de acción y los compromisos declarados en el programa de gobierno. Esta breve columna busca estimular una conversación necesaria sobre lo que se está desarrollando en un área especialmente significativa de las políticas educativas, aunque menos visibilizada: los planes curriculares que se están diseñando e implementando en jardines infantiles, escuelas y liceos para enfrentar estos inciertos contextos educativos.
Dentro del marco de las responsabilidades públicas que se desprenden de las consecuencias de la pandemia, el Ministerio de Educación ha actualizado recientemente la propuesta de priorización curricular con nuevos principios, criterios y clasificaciones extendiéndola hacia el año 2025, definición que se realizó en base a un proceso de consulta, lo que demanda apoyos y seguimientos para su apropiación curricular. Esta iniciativa, sin duda, movilizará un amplio debate sobre una nueva ruta de diseño curricular a nivel nacional para reequilibrar, priorizar y replantear los sentidos educativos.
La propuesta de priorización curricular, elaborada por el Ministerio de Educación, consiste en la selección de una muestra de objetivos de aprendizaje considerados clave o esenciales de los referentes oficiales. Sobre esa base, los equipos pedagógicos se han visto interpelados a tomar decisiones para definir una inédita ruta de planificación pedagógica de carácter local. Se trata de un poderoso ejercicio de contextualización curricular que busca responder con mayor coherencia a las necesidades e intereses de l@s estudiantes para avanzar consistentemente en las trayectorias formativas.
En este escenario de renovación, debemos reconocer y valorar que, a partir de la priorización curricular, se ha iniciado un camino de mayor autonomía y flexibilidad en los establecimientos educacionales, lo que ha sido un anhelado requerimiento de las comunidades educativas, puesto que permite nutrir la gestión curricular con dimensiones socioculturales propias de los territorios. Esta práctica de planificación que considera como guía central la priorización curricular, consiste en una tarea muy desafiante, puesto que los docentes no cuentan con materiales prescritos para esta propuesta transitoria, como ha sido históricamente el papel de los programas de estudio, rompiendo así una herencia pedagógica que se ha utilizado extensivamente en el proceso de planificación de la enseñanza.
En efecto, los docentes han debido movilizar un conjunto de destrezas con especial flexibilidad para reclasificar, reorganizar y reproyectar sus propias unidades o módulos, con experiencias educativas que recuperen lo esencial del valor del aprendizaje. En ello, deben articular los recursos en línea, los textos, las guías, la estimación de los tiempos y las evaluaciones que demandan los nuevos contextos
Sin embargo, a pesar de la disminución de objetivos de aprendizaje (en algunos casos se determinó priorizar un 30% de las bases curriculares vigentes), en la práctica durante el año 2022 no se alcanzaron a trabajar la totalidad de los objetivos priorizados de acuerdo con un seguimiento de autoreporte, en un alto porcentaje de los establecimientos, lo que abre diversas interrogantes sobre cuáles serían las dificultades para alcanzar una reducida cobertura curricular.
A este conjunto de piezas se suma un nuevo requerimiento que le otorga un mayor realismo didáctico a las planificaciones: la participación de la familia, lo que implica la construcción de nuevos mensajes pedagógicos. Se necesita comunicar a las familias lo que están aprendiendo l@s estudiantes, cómo pueden colaborar y acompañar en esta tarea de trabajo conjunto. Se trata de un nuevo diálogo educativo con las familias para entusiasmarlas y comprometerlas en los distintos desafíos, desde los más estructurales como la asistencia regular y también aquellos que involucran nuevos enfoques y aprendizajes, es decir, que van más allá de los límites de los conocimientos comunes.
Es así como la lógica de planificación cambia hacia una educación más contextualizada, que requiere partir desde los estudiantes, sus contextos y sus posibilidades. Además, los propios docentes han comprobado que es necesario estudiar previamente acerca de cuáles serían las experiencias de aprendizaje factibles de realizar, frente a escenarios educativos zigzagueantes. A pesar de la cadena de complejidades y las preocupaciones por el incremento de los aprendizajes descendidos, podemos concordar que ha sido una oportunidad para que los docentes puedan relacionar y movilizar los conocimientos pedagógicos activando un trabajo conjunto y colaborativo al interior de las escuelas.
Es una labor muy delicada, que exige modificar y adaptar conceptos y metodologías habituales para lograr dar respuesta a las brechas y rezagos en los aprendizajes. Es una situación muy distinta a la que venían realizando por años, con ciertos niveles de automatismo poco crítico, cuestión que se debe reconocer de cara a afrontar los retos del futuro.
Tomar decisiones sobre qué es lo prioritario de enseñar en tiempos de crisis es una tarea rigurosa, sensible y creativa, que se deberá traducir en la formación, en la práctica pedagógica de los docentes y en el diseño de políticas públicas más consistentes para estos nuevos compromisos. Supone la concepción de medidas de segunda generación que permitan orientar los distintos componentes que conforman esta inédita gramática escolar como son la integración de los aprendizajes, sus trayectorias y las evaluaciones con sentido pedagógico. Ciertamente, para llevar a cabo esta tarea transformadora, se requiere emprender un vigoroso plan de trabajo con amplios espacios de debate y deliberación que permitan proyectar las distintas voces y conocimientos.
Por otra parte, en este camino de redescubrimiento no exento de dificultades, como se ha descrito, aspiramos a que las escuelas de pedagogía puedan transformarse en plataformas prometedoras para aportar a estas nuevas avenidas de desarrollo curricular. De esta forma, los años de pandemia y pospandemia están abriendo puertas inesperadas para la generación de referentes curriculares más integrales, con enfoques interdisciplinarios que promueven el encuentro y la interrelación de saberes, experiencias y estrategias.
En definitiva, resulta fundamental reconocer que la posibilidad concreta de autogestionar el currículo, integrando visiones territoriales y modificando la secuencia lineal de los actuales programas o guías de estudio, potencia un espacio real para que las escuelas, liceos y jardines infantiles puedan impulsar procesos de innovación, atreviéndose a dar el paso para elaborar sus propios programas curriculares con nuevos enfoques, alineados por cierto con los referentes oficiales que proporcionan una plataforma básica común. A partir de estas iniciativas originadas en pandemia, podemos afirmar que en los últimos tres años se ha estado experimentando una silenciosa revolución curricular y didáctica que tendrá un enorme impacto en los procesos de aprendizaje presentes y futuros.
Este movimiento educativo obliga a una reconstrucción de la teoría, las metodologías y las prácticas pedagógicas, en la que se pone a prueba la creatividad y la resiliencia de los profesores y asistentes en todos los niveles educativos. Paralelamente, se interpela con sentido de urgencia al sistema educativo en sus distintas estructuras, definiciones y acciones estratégicas para orientar y acompañar las nuevas realidades pedagógicas.
Sin embargo, estas transformaciones que se están instalando en las escuelas no se han visibilizado, ni analizado con la suficiente profundidad. Los debates se han centrado en el meta-relato de la carta de navegación (2022-2026) del Ministerio de Educación, y en las medidas urgentes para la primera fase de la reactivación educativa.
L@s profesores siempre hemos estado en esas tareas, en ámbitos que no son de abundancia ni de claridades muchas veces, eso lo sabemos muy bien en nuestro país y en la región. No obstante, estamos en una situación inexplorada, donde aún no se sabe con exactitud el volumen de los daños y pérdidas educativas causados por la pandemia, como señala la UNESCO en el reciente informe mundial (2022). Por esa razón, es fundamental continuar estimulando los debates en torno al diseño e implementación curricular, nutriéndolo con distintos antecedentes a nivel local, regional y nacional: testimonios, datos, métricas de cobertura, planificaciones, metodologías, entre otros.
Tengamos presente que no se cuenta con marcos teóricos específicos que puedan colaborar en situar y orientar acciones en contexto de pandemia: se están construyendo sobre la marcha, en base a la experiencia, integrando otros códigos, muchos de los cuales aún son insuficientes para enfrentar la complejidad de los procesos y expectativas formativas.
Desde los distintos sectores de educación, hay plena consciencia de que el derrotero es complejo y que lo que ocurra o no ocurra durante ese proceso tendrá una incidencia profunda en la biografía de cada estudiante. Por esta razón, es valioso promover una ruta de intercambios, seminarios y debates en torno al currículum y sus desafíos.
En definitiva, se trata de una tarea colectiva en la cual se han dado pasos significativos, pero es necesario continuar avanzando en involucrar y comprometer con más voluntad política y despliegue comunicacional a familias, comunidades educativas, centros de formación y de estudio, sociedad civil, especialistas en educación, líderes políticos y otros organismos públicos y no públicos, a nivel nacional y local.
16 comentarios en “Primeros pasos para reimaginar las políticas curriculares”
El artículo no es sólo interesante; es necesario. Para ser más libres tenemos que ser educados, porque en los tiempos que vivimos, tanto el trabajo como las exigencias de la sociedad. Involucrar a la familia y la comunidad es esencial,porque las condiciones actuales del mercado laboral facilitan el ausentismo de los niños. Gran artículo que abre una esperanza. Parece urgente también revalorizar el trabajo de los profesores, tan necesario como el de un ingeniero, un arquitecto o un cientista social. Es una labor esencial, sin la cual no hay desarrollo
Gracias por la reflexión. Respiro. Siento y pienso que los apuros no nos ayudan para todo lo que se requiere mirar en detención, tal como observas en el articulo. No veo posible separar áreas del desarrollo humano, (por ende social) para su análisis y proyecciones… eso ya no funcionó. Me resuena más convocar a distint@s actores que hacen parte de la escena educativa y por tanto hacernos pensar y repensar, desde el mundo que queremos habitar hasta la capacidad de inducir o deducir contenido en una evaluación de lenguaje. Aparece como urgente detenerse frente a la alta complejidad y «cuajar en nuestros cuerpos» la enorme experiencia de estos últimos años, impulsada por el desarrollo tecnológico y las rrss transversales en nuestra sociedad y recién ahí, al reconocernos distint@s que hace 10 años atrás. Quizás así crear visión futuro común y visualizar las herramientas que debemos desplegar para ello.
Abrazos
Very interesting info!Perfect just what I was looking for!
I like this post, enjoyed this one regards for posting. «We seldom attribute common sense except to those who agree with us.» by La Rochefoucauld.
You completed certain good points there. I did a search on the issue and found a good number of persons will have the same opinion with your blog.
Wonderful website. Plenty of helpful info here. I’m sending it to some friends ans additionally sharing in delicious. And naturally, thank you to your effort!
Hello, I think your blog might be having browser compatibility issues. When I look at your blog in Ie, it looks fine but when opening in Internet Explorer, it has some overlapping. I just wanted to give you a quick heads up! Other then that, great blog!
Thanks for every other informative site. The place else could I get that kind of info written in such an ideal approach? I’ve a challenge that I’m just now operating on, and I’ve been at the glance out for such information.
great put up, very informative. I ponder why the other specialists of this sector do not understand this. You must proceed your writing. I am confident, you have a huge readers’ base already!
Heya i’m for the first time here. I found this board and I find It truly useful & it helped me out a lot. I hope to give something back and aid others like you aided me.
When I initially commented I clicked the «Notify me when new comments are added» checkbox and now each time a comment is added I get four emails with the same comment. Is there any way you can remove me from that service? Many thanks!
Great write-up, I?¦m regular visitor of one?¦s site, maintain up the excellent operate, and It is going to be a regular visitor for a long time.
Why viewers still use to read news papers when in this technological globe all is presented on net?
I loved as much as you’ll receive carried out right here. The sketch is tasteful,
your authored subject matter stylish. nonetheless, you command get got an impatience over that you
wish be delivering the following. unwell unquestionably come further formerly again as exactly the same nearly
very often inside case you shield this increase.
My spouse and I stumbled over here coming from a different page
and thought I may as well check things out. I like what I see so now i am following you.
Look forward to going over your web page repeatedly.
As a Newbie, I am permanently exploring online for articles that can aid me. Thank you