Por Rolando Cárdenas
Es lo electoral, estúpido
Anticipadamente, la política entró en tiempos electorales. Cada acción de los distintos actores políticos tendrá esa variable como el elemento principal para tomar definiciones; pero, lamentablemente, tanto oficialismo como oposición están siendo requeridos por decisiones de carácter más estratégico.
Veamos los escenarios que enfrentan las fuerzas políticas. En la oposición, su sector más liberal hace años que esta intentando virar al centro, sin embargo, los porfiados hechos y su electorado más duro han indicado un camino distinto, hoy en que ese terreno dorado que representa el centro en términos electorales no tiene representación clara, DC, Amarillos y Demócratas intentan ocupar ese espacio, pero en las elecciones recientes sus resultados han sido extremadamente magros.
La oposición entonces esta tironeada por su extremo derecho con republicanos y el grupo de Rojo Edwards y aun cuando Evopoli, Amarillos y Demócratas han manifestado su rechazo a pactar con ellos, la UDI ya envió la señal que buscará un acuerdo amplio con todas las fuerzas opositoras. Y aquí veremos manifestarse los intereses particulares, parlamentarios que entienden que el voto duro es suficiente para ser electos, los presidenciables del sector que tienen una realidad disímil, Matthei, que le conviene un pacto amplio para garantizar que todo el sector la apoye, y Kast que está bajo en las encuestas y que le conviene ir a primera vuelta más que a primarias. Y en esa primera vuelta el voto duro será clave y esa es la posibilidad de Kast de llegar nuevamente a la papeleta de segunda vuelta.
En el oficialismo es una situación similar multiplicada por menos uno, es decir el movimiento de los actores es tratar de tomar el tercio de apoyo irreductible que ha mantenido el gobierno, el diputado Winter ya ha salido a criticar al gobierno por buscar acuerdos con la oposición y sostiene que hay que mantener las propuestas indicadas en el programa, aun cuando ello signifique perder en el parlamento y además atacó con dureza a Amarillos y Demócratas, que son votos claves en el parlamento para que el gobierno avance en sus propuestas legislativas.
Por otra parte, el jefe de la bancada del PC, diputado Luis Cuello, apuntó que no se ha podido avanzar en las reformas propuestas por el gobierno, porque no ha existido movilización social.
Tanto el PC como el FA apuntan a ese voto duro que apoya al gobierno y al presidente Boric. El Socialismo Democrático y la DC necesariamente deben jugar la carta de la moderación que muy bien graficó la ministra Tohá, quien indicó «los testimonios no son avances sociales si no se logran transformar en acuerdos democráticos», lo que grafica muy bien la encrucijada del gobierno: buscar avanzar en las reformas claves que el país necesita, aun cuando no será todo lo que ha propuesto sino avances y quizás pequeños, pero es eso o tener una política testimonial.
El FA, que creció a partir de la critica a la Concertación precisamente por terminar pactando siempre, tiene claro que tal como están las cosas, dado el demoledor impacto del caso Democracia Viva para ellos, es el PC quien puede alzarse como el partido electoralmente más importante de la coalición gobernante.
¿Qué es lo interesante en este escenario? La obligatoriedad del voto, variable que nadie es capaz de predecir hacia donde se moverá. Aunque se asume que es un voto más conservador, no existen certezas, y ese vector puede ser el que genere una sorpresa en los resultados de los próximos eventos electorales que se avecinan.
Eventos judiciales que complican
El caso Democracia Viva seguirá dañando al gobierno, ahora que rebajaron las medidas cautelares a los dos principales implicados, Contreras y Andrade. En sus declaraciones a la salida de la cárcel, Contreras insistió que los directivos del Minvu conocían lo que se estaba realizando con las fundaciones, generando nuevos flancos que la oposición aprovechará políticamente.
Por otra parte, sigue complejizándose el caso del secuestro del militar venezolano Ronald Ojeda. A una semana del caso, no hay claridad de quiénes actuaron y cual sería el móvil. Las especulaciones abundan y el cuestionamiento sobre el subsecretario Monsalve y su asesor Juan Andrés Lagos, por el convenio firmado con Venezuela y la forma en que se ha desarrollado la investigación, y las tesis de intervención de la CIA de Lagos, no se han hecho esperar por parte de la oposición.
Polarización
No se puede negar la debilidad del Estado en ciertas áreas, como la inteligencia o política migratoria, pero esa debilidad estructural es responsabilidad de una clase política que hace años no busca solucionar los problemas sino aprovecharlos para utilizarlos políticamente. Son tiempos en que la polarización rinde electoralmente y todos los actores ya aprendieron el juego.