Semanas movidas en el mundo de las ciencias

La institucionalidad del ministerio de las Ciencias sigue en zozobra, últimamente por la precipitada renuncia de un seremi cuestionado por ser deudor de alimentos. Y se prevé que próximamente se reestructuren las seremías, al tiempo que se rumorea que habrá nuevos cambios en ese nivel, en los que las culpas no las pagarán los pecadores.

Equipo de El Regionalista

Varias semanas movidas ha tenido el mundo de las ciencias en Chile.

A principios de abril se conoció el informe final de la auditoría financiera que la contraloría realizó a la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), organismo estatal que en 2020 reemplazó a Conicyt, y que es la agencia del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (CTCI) que financia proyectos y becas de estudios de postgrado nacional y en el extranjero.

Y este informe de Contraloría produjo varios coletazos, ya que en parte del periodo auditado la actual ministra del Ministerio de CTCI, Aisén Etcheverry (RD) fue directora de la ANID. El informe indicaría que “se constató que la ANID no mantiene información respecto a la identificación de los becarios, estado o situación de la beca, monto y fecha de las transferencias otorgadas, fecha de término del beneficio y período de retribución de éste, deudores categorizados a raíz de incumplimiento (s) y solicitud de restitución y/o gestiones de cobranza de corresponder, entre otros, lo que impide a la ANID realizar un seguimiento oportuno a las obligaciones pactadas en los convenios con cada becario”. El informe de Contraloría trajo como consecuencia una fuerte crítica por parte del senador Alfonso De Urresti (PS), miembro de la Comisión de Desafíos del Futuro y Ciencia del Senado.

A eso le podemos sumar que hacía un tiempo que el seremi de Ciencias de la macrozona centro, que comprende las regiones de Coquimbo y Valparaíso, Jorge Soto, doctor en Química, había renunciado a su cargo. Una renuncia que en Coquimbo no causó extrañeza porque en el mundo de la investigación reclamaban que no se le conocía puesto que no iba a la zona. Por ello, la búsqueda de un sucesor se hizo inminente, recayendo la nominación en Daniel Salinas (PC), quien realiza su doctorado en Ciencias Físicas. Hasta ahí todo bien, pero seis días después se le pidió la renuncia por ser deudor de alimentos, en otras palabras, un papito corazón…. Llama la atención tanta desprolijidad en un ministerio donde quienes han entregado informes técnicos y financieros según los estándares de su agencia, la ANID, conocen de su severidad.

Estos próximos meses se vienen nuevos anuncios, las macrozonas comenzarán a reorganizarse con nuevas seremías que comprenderán máximo dos regiones, siendo las macrozonas norte, centro sur y sur, las que tendrán nuevas oficinas y seremis.
Esperemos que el nombramiento no siga cayendo en errores no forzados e innecesarios en un año de elecciones y en un área donde la rotación de ministros en este gobierno ha sido más alta de lo esperado y deseado para un trabajo continuo en una institucionalidad clave cuando hablamos de desarrollo y futuro para el país.

Y como al parecer los nervios e inseguridades andan a flor de piel, habría más cambios en las seremías de Ciencias. Porque a veces pagan justas por pecadores…